En este capítulo aprenderás a combinar la luz natural y el flash en tus fotografías de retrato en exteriores. Y es que te vas a encontrar en muchas ocasiones en las que el contraste entre luces y sombras que da el sol es demasiado fuerte.
En ocasiones nos enfrentamos a la dificultad de tener que mezclar luz continua (la del sol) con luz de flash porque, como es el caso, queremos contrarrestar el contraste en las sombras que nos da el sol y no perder, sobre todo, la información que podamos transmitir con el rostro en nuestro retrato.
Este caso hará que no podamos disparar únicamente mirando el histograma, ya que no será real la medición al añadir el flash. Para ello haremos una medición puntual en el elemento más claro para ajustarlo a nuestro gusto (plantearnos si queremos o no sacrificar el cielo para que se vea o no).
Una vez tengamos una exposición correcta, rellenaremos con el flash (añadiendo un difusor para suavizar levemente la luz). Deberemos visionar en cada toma si es suficiente y es lo que buscamos sin pasarnos, ya que si no, la imagen podría quedar demasiado irreal y “procesada” respecto a la luz que hemos añadido.
Nos ayudaremos de un flash que colocaremos a un metro de distancia (siempre mirando que no nos moleste en el plano) y jugaremos con la localización del puente, implementando tanto un punto de fuga como es el final del puente o la parte superior, creando un mosaico o simetría que romperá el modelo gracias a su posición. De esta manera podrás mezclar correctamente la luz natural y flash.
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